Volveremos a abrazarnos

Pasé
el fin de semana en la casa de mi hermana menor, que es además mi ahijada. ¡Qué difícil saludarnos sin poder darnos un abrazo! Ni a ella, ni a mi cuñado, ni a sus hijos y ni a sus nietos. Nos saludamos con los codos … raro, muy raro. Y, aunque todo fue muy lindo, a la noche no lograba conciliar el sueño reflexionando sobre el mundo que parece que se nos viene: ¿Nos tendremos que acostumbrar a saludarnos con los codos? O, peor: ¿de ahora en adelante temeremos el contacto con el otro, sea quien sea, y el otro temerá nuestra cercanía?

“Distanciamento social”, dos palabras opuestas que se juntaron para definir una situación innatural. Socializar significa justamente acercarse a los demás; tomar distancia es exactamente lo contrario. Pero parece que llegaron para quedarse y empezamos a pronunciarlas como si fuera algo normal.

Confieso que no lograba dormirme pensando en lo que estamos viviendo y en el hecho de que pareciera que lo anormal se está volviendo regla de convivencia. Hasta que me vino el recuerdo de un abrazo que … me volvió a abrazar con la misma intensidad de cuando ocurrió.

Quiero contarlo bien, pues aunque sucedió hace tiempo lo tengo siempre muy presente: teníamos 20 años, íbamos de gira por muchos países de Europa con el conjunto internacional “Gen Rosso”. Estábamos a la merced de nuestras fuerzas e impulsos juveniles. Podíamos canalizar bien nuestras energías, de manera que sirvieran a los demás y a nosotros mismos; o desperdiciarlas siguiendo caminos fáciles pero, que a la larga, nos hubieran hecho sentir mal y, sobre todo, no hubieran sido útiles para nadie.

Renata Borlone era la responsable, junto con Alfredo Zirondoli, de la ciudadela de Loppiano (cerca de Florencia) donde estaba la base de nuestra banda. Desde allí partíamos y allí regresábamos terminada la gira. Fue en uno de esos regresos, luego de una larga ausencia, que nos cruzamos con Renata. La queríamos mucho, casi como a una madre, y ella nos sostenía también con la oración y conocía muy bien todos los riesgos que podíamos correr. Por  eso cuando la encontramos nos llenamos de alegría y también ella por supuesto. Pero lo que yo quiero recordar ahora fue su caluroso abrazo. O mejor, lo que todos sentimos a pesar de que ella -según la costumbre italiana de una mujer adulta hacia jóvenes como nosotros-, no nos tocó ni con un dedo. Sin embargo los tres coincidimos que sentimos su acogida tan calurosa como si nos hubiera abrazado. Cada vez que lo recuerdo me vuelvo a sentir abrazado del mismo modo.

Este pensamiento que me volvió a la memoria, hizo el efecto de un somnífero inmediato: me dormí sereno.

Al día siguiente saqué mis conclusiones. Espero con ansias el momento en que volveremos a abrazarnos y a cancelar el “distanciamiento social”. Espero que la pandemia pase como una pesadilla que sirva incluso para aprender muchas cosas positivas y vivamos una vida más austera, más unidos, más solidarios. Pero por sobre todas las cosas, espero saber abrazar a quien me queda cerca con el calor profundo de Renata, más allá de poder hacerlo físicamente o tan sólo desde el corazón. Un abrazo que no se inventa, que es fruto de un ejercicio cotidiano de poner el interés del otro por encima de uno mismo; de querer tanto el bien del otro que cada uno se sienta abrazado con todo el calor del que podemos ser capaces, aunque no movamos físicamente ni un dedo. Yo lo definiría: un abrazo del alma. ¡Abrazarnos con toda el alma!

Gustavo E. Clariá

Visits: 246

Condividi

Pubblicato da Gustavo Clariá

Nato a Córdoba, Argentina, nonno piemontese, economista, comunicatore, scrittore. Ho vissuto la metà della mia vita in Europa (Italia in particolare) e l'altra in America Latina. Giramondo, aperto alla conoscenza di altre culture. L'unità, nel rispetto della diversità, della famiglia umana, è il mio orizzonte. Cerco, quindi, di vivere la mia giornata "costruendo rapporti" di concordia e di unità. Il mio contributo alla pace.

27 Risposte a “Volveremos a abrazarnos”

  1. Gracias hermano me encanto❤️😘 👍💪
    Hermoso! yo me senti siempre abrazada por vos🙅‍♀️❤️😘

  2. Hola Gustavo !!! Qué alegría!
    Linda historia del abrazo.
    Vamos a rezar para que podamos seguir abrazandonos.

  3. Gracias Gustavo. Muy bueno como siempre.
    Te confieso que me cuestiona mucho todo esto del distanciamiento social que surge por la pandemia.
    No me engancho en las teorías de conspiración, pero me pregunto si no hay intereses a los que les sirve que nos distanciemos y hasta temamos estar cerca de la gente…
    Siento un gran desafío en el no dejar de relacionarnos y ser familia humana a pesar de tener que estar lejos unos de otros físicamente… Y te confieso que en algunas ocasiones he violado la norma del distanciamiento y abracé algunas personas porque ya sentía que si no me muero de Covid me muero de falta de afecto 😀🤦‍♂️
    Acabo de hacer una experiencia maravillosa de comunión online con las focolarinas de Pitalito…
    Me hicieron sentir en familia aún con mi realidad de estar sólo aquí en la Fazenda (estoy con 3 muchachos acogidos pero sin compañero). Y es el nacimiento de una unidad muy bonita creo.
    Un gran regalo de Dios.

  4. Querido Gustavo!!
    Tu escrito sobre el abrazo y la experiencia fuerte con Renata me trajo a la memoria está canción que acabo de buscarla en YouTube y veo que ha sido grabada para este tiempo de pandemia. Es para poner música a tu escrito…
    Y por otro lado me quedé pensando que ese abrazo con el alma tan profundo que experimentaron con Renata debe tener que ver con una fuerte presencia de María que ella transmitía. Por lo que siento de pedirle a María que nos enseñe en este nuevo tiempo de la humanidad a abrazar al otro con el alma.

  5. Molto molto bello Gustavo! E possiamo ipotizzare anche l’abbraccio a distanza! Non ci vediamo, non ci parliamo ma ci abbracciamo 🤗. Perché i nostri cuori contengono l’altro e leggere quello che hai scritto mi ha portato ad abbracciarti caldamente. Ti auguro una bella giornata 😊1️⃣

  6. Grazie per questa esperienza ! Si è vero ci manca il contatto fisico con gli altri l’abbraccio la stretta di mano un semplice bacio, con questi semplici gesti noi esprimiamo tutto il nostro amore e la nostra stima verso l’altro ma penso che lo possiamo esprimere anche con un sorriso o con uno sguardo. Ecco io penso che al momento sono questi piccoli gesti che abbiamo per dimostrare il nostro amore verso l’altro. Ma la cosa comunque che conta penso che alla fine è amare l’altro per amare Gesù ! Un abbraccio virtuale. Grazie !!;😀😀1️⃣🙏

  7. Grazie Gustavo,
    è vero quello che non è normale, è proprio non poterci abbracciare……speriamo di poter tornare ad abbracciarci…….intanto un intenso abbraccio dell’anima.

  8. Bellissimo Gustavo, grazie della riflessione sull abbraccio e x l esempio di vita di Renata….Sn riferimenti storici preziosi x ki ha okki x guardare…..Grazie

  9. Caro Gustavo, grazie sempre per come sai raccontare gli argomenti che scegli. Sai sempre colpire al cuore. Ti mando un grande abbraccio… dell’anima…

  10. Me encanta todo tu comentario .
    Aquí tb nos saludamos con los codos . Creo que la gente está con miedo y x algún tiempo vamos a seguir así.

  11. Muy bueno, para la reflexión. Nos abrazamos “a lo Renata” un tiempo largo o se impondrá para siempre otra forma de expresar el afecto con hermanos, nietos….? Si, me refiero a lo formal. Cambiará la cultura? Vos al haber viajado tanto habrás visto todo tipo de saludo y lo que vale es el “abrazo de Renata” profundo, de corazón. Por eso podemos decir que nos seguimos abrazando, y quizá más que nunca en estos tiempos de “distanciamiento social”.

  12. Para colmo con lo abraceros que somos los latinos 🤦‍♀️… Estoy,… estamos todos adoleciendo del abrazo de madres, padres, sobrinos,hermanos, nietos!!! La añoranza que da el abrazo hace suspirar hondo y sólo con la convicción de que cuidamos del otro y aquél otro de nosotros, se alivia la angustia 🤷🏻‍♀️… Mañana es el cumple de mi mamá ( 83) y muero de ganas de estar y abrazarla, pero ella nos llamó ayer ( con la experiencia que dan los años y el amor de mamá ) y nos pidió que la saludaramos por teléfono y que nos cuidaramos, para podernos abrazar cuando esto pase…
    De más está decir la coincidencia y el alivio que trajo tú historia a mi situación…
    Gracias como siempre…

Comments are closed.