Una solución inesperada

Lo
invitamos a almorzar, sabíamos que estaba solo y tensionado por la situación en que se encontraba. Juan había dejado su país a las espaldas en busca de un futuro mejor, pero había ingresado al Perú sin documentos y a través de una frontera sin custodia. Juan era un ilegal y esa era su tragedia cotidiana. ¿Si lo detenía la policía…?

Llegó a casa con atraso y no paró de hablar, de contar su situación, sin casi probar bocado. La “electricidad” que transmitía era impresionante. ¿Cómo ayudarlo? Podíamos escucharlo, permitir que se desahogara, era ya seguramente un pequeño alivio para él. Y fue justamente mientras lo escuchábamos, que uno de nosotros notó que había dicho “en passant” que su madre tenía otra nacionalidad. “Pues entonces puedes dirigirte al consulado del país de tu madre, presentar los documentos necesarios que ella te podría enviar y sacar el pasaporte con la nacionalidad de tu madre; desde ese momento no serías más refugiado de tu país de orígen sino del de tu madre que mantiene acuerdos con el nuestro”. Fue algo que nadie había pensado antes, ni él mismo, y tal vez no estaba preparado para algo tan inesperado: aceptar cambiar su nacionalidad para poder legalizar su situación en este país en el que encontró refugio y hasta un trabajo en propio. Luego de un momento de desconcierto, la sorpresiva propuesta ya no le parecía tan extraña. En el fondo, ¿era o no hijo de su padre y de su madre? ¿Qué tenía, entonces, de extraño presentar sus orígenes maternos que eran de otra nacionalidad? Pero hay que ponerse en el pellejo de un joven teniente formado militarmente: su patria es sagrada. Presentarse con otra nacionalidad, aunque sea sólo una formalidad para legalizar su residencia y así poder trabajar, para él tal vez era una especie de traición. Decidimos tácitamente no forzar sus tiempos.
Lo
dejamos con esa propuesta, indicándole eventualmente los pasos a seguir, pero respetando sus tiempos y la decisión final. Fue una experiencia de acogida y de escucha. Y quizás fue esa actitud que permitió a uno de los presentes vislumbrar una posible solución. A pesar de que su plato quedó a medio comer, Juan se marchó más sereno y con una carta para jugar. Algunos días después, nos llamó para decirnos que había decidido hacerlo y nos pedía si alguno de nosotros podía acompañarlo con los trámites para no sentirse solo. El trámite se presentó sin dificultades y obtuvo su nuevo pasaporte. Ahora Juan trabaja legalmente en nuestro país y vive sereno. Cuando construimos relaciones positivas, puede suceder que algo nuevo nazca: una idea nueva, una iniciativa original, recursos impensados o, como en este caso, una solución inesperada.   Gustavo E. Clariá

Visits: 259

Condividi

18 Risposte a “Una solución inesperada”

  1. Muy buena obra!!! Tratando de ayudar y solucionar problemas e inconvenientes. Abrazo y Feliz Navidad!!!! Que Jesús y María nos acompañen siempre en nuestras vidas.

  2. Gracias QUERIDO GUSTAVO. HERMOSA EXPERIENCIAS GLORIA A DIOS Y A VIRGEN MARIA 🙏 ALEGRIA PARA NUESTRA QUERIDA CHIARA LUBICH UN ABRAZO 🤗🙋‍♂️🙏👍

  3. Que buen acompañamiento, Gus; sin forzar al otro, pero aportando en positivo en pos de una solución. Gracias!

  4. Io sto vivendo un problema analogo con John, ragazzo peruviano che,a Bergamo, fa il badante a Eugenio, padre della compagna di mio figlio, ex giocatore di calcio di serie A attualmente affetto da esiti di encefalite (fisico in formissima ma cervello in tilt). Hanno stabilito tra loro una simbiosi perfetta ma John dovrà tornare in Perù perché a dicembre scadrà il suo permesso di soggiorno !

  5. Grazie un esperienza di Gesù in mezzo fortissima quando riusciamo a fare il vuoto in noi stessi per ascoltare l’altro per farci uno con lui allora l’altro di sente amato e Gesù è lì in mezzo a noi e quindi le soluzioni per i nostri problemi escono fuori perché li trova Lui !!! Grazie Giov ti abbraccio !! 1️⃣

  6. Evviva lo Spirito Santo che vi ha suggerito questa soluzione
    E bravo che non hai messo la nazionalità per tutelare la scelta di questo ragazzo 😉

  7. Gracias por compartir esta valiosísima experiencia!! esta experiencia me ayudará a transmitir lo que significa ” Acoger” que es el primer pilar que nos ha dado el Papa Francisco a los que colaboramos con la Pastoral de inmigrantes. Y los frutos que produce esta actitud cuando se vive sobre todo en comunión.

Comments are closed.